Leticia Cossettini: 100 años de magia y dignidad
por Rubén Naranjo

La ciudad de Rosario ha sido la geografía rebelde donde se gestaron algunos de los proyectos pedagógicos más importantes del Siglo XX. Nombres como Escuela Serena y Biblioteca Vigil han quedado grabados a fuego, a pesar de tanta persecución, de tanto silencio impuesto. Sueños educativos donde poesía y pensamiento tendieron sus manos para construir un futuro posible. Para mostrar, y demostrar, que "algo sucedía".

 

 

En la escuela Dr. Gabriel Carrasco de Rosario se realizó una experiencia educativa de altísima significación pedagógica entre los años 1935 y 1950, a partir de asumir Olga Cossettini el cargo de directora e incorporarse su hermana Leticia a la planta docente.
Las ideas renovadoras que en las primeras décadas del siglo XIX se desarrollaron en los medios educativos de Europa fueron aplicadas en la escuela de las hermanas Cossettini que fue reconocida como "Escuela Serena", tomándose la denominación vigente entonces en Italia.
Las hermanas Cossettini implementaron su labor cumpliendo las disposiciones existentes en el ámbito oficial y, además, incorporaron nuevas prácticas en el espacio particular de la escuela que proyectaron con toda fuerza al barrio, exaltando los valores individuales de los alumnos y potenciando sus posibilidades manuales, intelectuales y expresivas.
El tiempo transcurrido permite asegurar que en la concreción del proyecto, la visión de Olga fue fundamental, y en la apertura al mundo imaginario Leticia aportó su delicada sensibilidad y cualidades artísticas. Supo comunicarlas a los niños, logrando de éstos bellísimas respuestas. La actividad musical, el increíble coro de pájaros, las danzas y la fantasía de los dibujos y las acuarelas que llenaron páginas de sus cuadernos, testimonian aquel pasado de encanto poblado de magia.
Cuanto aconteció en las aulas de la Escuela Carrasco en aquellos años de fervorosa apertura, es hoy estudiado en institutos de formación de docentes, y tratado en escuelas y congresos internacionales. Pero para aquellos años de oscurantismo resultó peligroso.
El ministro de Educación Raúl Rapella, del gobierno provincial, decretó la liquidación de la experiencia y la cesantía de las hermanas Cossettini, en agosto de 1950.
Olga nunca más regresó a la escuela y Leticia recién fue invitada en 1992. Habían transcurrido cuarenta y dos años y se habían sucedido gobiernos civiles y militares. Obviamente aquella "escuela" seguía siendo peligrosa.
Mario Piazza recuperó imágenes de actos y momentos del acontecer diario de aquella escuela, así como testimonios de Olga, Leticia y ex alumnos. Los plasmó en su película "La escuela de la señorita Olga", proyectada en pantallas de instituciones argentinas, de países americanos y europeos, recibiéndose siempre el asombro y el reconocimiento por la existencia de una realidad tan lejana en el tiempo y tan valiosa en la actualidad.
En 1997, el Ministerio de Educación de la Nación realizó una película para exaltar los preceptos de la Ley Federal de Educación mostrando particularidades de una hipotética escuela que se exhibía como modelo de futuro. A su vez, y para mostrar una escuela decadente, ofrecía imágenes y textos de la película de la experiencia Cossettini, a la cual, precisamente esa Ley pretendía superar.
La persecución no había cesado. En 1950 y en 1990, la Escuela Serena de las hermanas Cossettini seguía siendo peligrosa. Así fue considerada porque los niños pudieron expresarse con absoluta libertad, porque sus iniciativas fueron alentadas y porque todo el quehacer escolar se sustentó en la práctica solidaria y en la alegría de vivir.
La realidad educativa de la escuela Carrasco no pudo ser aceptada por el oscurantismo político y cultural del peronismo de 1950 y por ello se anuló la experiencia sin fundamentarse el motivo en el decreto provincial.
Rodeada de afectos, de pájaros y de flores, Leticia cumplió 100 años el 19 de mayo.
Rememora aquellos años con mucha emoción y profundo respeto por los protagonistas de aquella historia única: los niños, los maestros, los vecinos. También mucha gente que desde alejadas ciudades del país y del mundo participaran de encuentros individuales: Margarita Xirgú, Javier Villafañe, Juan Ramón Jiménez, Francisco Romero, Horacio Buttler, Gabriela Mistral, quien besó uno a uno a los cuatrocientos chicos de la escuela.
Saludamos los cien años de Leticia, ofreciendo sus palabras:
"Exploro en los testimonios reunidos en quince años: en centenares de impresiones escritas por niños espectadores e intérpretes; en el precioso caudal de dibujos y acuarelas reunidos año tras año, en las fotografías que fijan el clima de armonía, en los cuadernos que siguen todo el nacimiento y florecimiento de un niño; en el recuerdo de los hombres simples que levantando los ojos del vivir cotidiano, se sentaban a mirar y sentían que algo ‘sucedía’, en el juicio de hombres y mujeres ilustres y de maestros fervorosos que llegaban de comarcas y países diversos y pensaban que ‘algo sucedía’, en la imagen de las niñas que, en los atardeceres apacibles o en las noches claras, jugaban a los ‘romances’ mientras hombre y mujer, el uno junto al otro, en silencio, pensaban que ‘algo sucedía’.
La escuela y el niño eran vehículos de ese aliento poético".

 

Por la Vigil

Once meses después del Golpe de Estado de 1976, el gobierno militar de la provincia de Santa Fe intervino la Biblioteca Popular Constancio Vigil, de Rosario. Fue el 24 de febrero de 1977. Comenzó allí un proceso de liquidación judicial y saqueo de la institución, que incluyó desde la quema de libros (el lugar albergaba 70.000 volúmenes) hasta el robo de la lente del telescopio del observatorio que funcionaba en el edificio de Alem y Gaboto. La persecución se extendió a directivos y docentes de aquel proyecto social y educativo. Veintisiete años después, la Comisión para la Recuperación de la Biblioteca Constancio Vigil, conformada por ex-directivos de la entidad, docentes, alumnos y vecinos del Barrio La Tablada, continúan reclamando "la restitución de la personería jurídica, la devolución de los bienes y la investigación de los hechos que siguieron a la intervención de la entidad". El reclamo contempla la idea de revitalizar el proyecto que marcó la historia cultural de la región. "La Vigil para el pueblo que la creó", sostiene la Comisión, que invita a las reuniones abiertas de los miércoles, a las 22 horas, en el 2º Piso del mítico edificio de Alem y Gaboto.

 

 

 

volver a Alapalabra Nº 3 . volver a todas las tapas

 

Números Anteriores

. Ver todas las tapas

. Año II Nº 10 Octubre 2005

. Año II Nº 9 Julio 2005

. Año II Nº 8 Marzo 2005

. Año II Nº 7 Febrero 2005

. Año I Nº 6 Noviembre/Diciembre 2004

. Año I Nº 5 Octubre 2004

. Año I Nº 4 Agosto 2004

. Año I Nº 3 Junio 2004

. Año I Nº 2 Abril 2004

. Año I Nº 1 Marzo 2004

 

 

Inicio . Noticias . Historia . Edición Papel . Archivo . Multimedia . Contacto

Alapalabra © Todos los derechos reservados