V CONGRESO
DE LA INFANCIA Y ADOLESCENCIA EN SAN LORENZO
A fines
de octubre se desarrolló en San Lorenzo
el V Congreso Nacional de la Infancia y Adolescencia,
uno de los encuentros más importantes
a nivel nacional dedicado al tratamiento de
la cuestión de los niños y jóvenes.
De la reunión, organizada por la Universidad
Nacional de Rosario y la Asociación
de Abogados del departamento San Lorenzo,
participó Darwinia Gallichio, representante
de Abuelas y Madres de Plaza 25 de Mayo. Estas
fueron sus palabras.
-Reunirse
para hablar sobre la niñez y la adolescencia:
¿entre quiénes nos reunimos?.
¿Entre los que pensamos igual?. ¿Entre
los que estamos asustados, o preocupados,
u ocupados, o esperanzados ante la situación
actual de millones de niños y jóvenes,
ante el análisis de un pasado que lacera
y de un futuro incierto?. ¿Con qué
clase de mirada analizamos el problema?. Porque
hay miradas y miradas. Tantas miradas como
intenciones, tantas como elecciones. Una de
ellas nos provoca preguntarnos: ¿qué
clase de niñez y adolescencia está
en la historia social, familiar y personal
de los protagonistas de hoy?. ¿Los
que nos confortan?. ¿Los que nos espantan?
¿Los que nos conmueven?. No es privativo
de esta época del mundo ni de nuestro
país el maltrato y la desatención
de la sociedad hacia los niños.
Los docentes están
en situación de riesgo porque el Estado
no los protege. Las políticas públicas
deben evitar la exclusión manifiesta
o solapada. ¿Por qué el maestro
con menos puntaje va a parar a las villas?.
Hay veces en que la máxima aspiración
de muchos maestros es llegar a una "escuela
del centro" por los sueldos y porque
da jerarquía. Al mismo tiempo, cada
vez más docentes toman el trabajo en
las escuelas marginales como una opción
profesional. En las escuelas marginales todos
son trabajos reales, o delitos. Y ese delito
se toma como un trabajo: robar, prostituir
o traficar drogas. ¿Qué política
de contención hay para que esto no
suceda?. ¿Hay escuelas de doble escolaridad?.
¿Escuelas de oficios?. ¿Qué
se hace para educar a los padres en su responsabilidad
de ser ellos el sustento de sus hijos y no
al revés?. ¿Qué ha sucedido
para que los padres lleguen a esta situación?.
Por supuesto, la falta de trabajo, un país
arrasado, el analfabetismo y la falta total
de estímulos y valores morales. La
escuela pasó de ser un templo del saber
a un depósito de niños, comedor,
lugar de contención, o también
objeto de vandalismo.
Adolescencia en problemas.
La consecuencia de lo que los niños
vieron y revivieron. En el 2001 la muerte
de militantes populares. Los piqueteros. Los
atentados. Los secuestros. La destrucción
del patrimonio nacional. La basura mediática.
La depredación de la naturaleza, la
contaminación o la despiadada extinción
de animales y bosques. En lejanos países,
la destrucción de las torres gemelas,
las guerras sin justificación, violencia
y terror por doquier. No podemos enorgullecernos
de estos ejemplos para la juventud.
La identidad robada, no
solamente en el despojo de empresas nacionales,
sino en el mismo plan siniestro: los niños
como botín de guerra. En 1995, el Comité
de Derechos Humanos de las Naciones Unidas,
consideró que el Estado argentino violó
el Pacto Internacional de Derechos Cívicos
y Políticos, porque se reconoció
oficialmente la identidad de Ximena Vicario
en 1993, cuando tenía 18 años
y no se me permitió a mí, como
abuela, ser querellante.
Ante este panorama desalentador,
en lugar de mirar para otro lado, como dicen
los chicos: "a ponerse las pilas".
Tenemos valores en nuestro país, tenemos
cultura, tenemos potencialidad, que intentó
ser vaciada de contenido con un cuento de
globalización, con una modernidad que
dejó las cosas peor que antes. Pero
hoy, por nuestro propio esfuerzo, podemos
empezar a revertir este estado de cosas.
Traigo mi voz esperanzada.
No resolveremos las cosas con aumento de penas
sino con una juventud ocupada y desalienada,
informada y solidaria. ¿Qué
resolveremos con la pena de muerte?. Soñar
un país de "buenos" donde
los "malos" deben purgar de por
vida su delito, parece más un sueño
hitleriano que un proyecto de vida mejor en
un país lleno de posibilidades, estragado
por algunos bandidos.
Quiero agregar que las
Abuelas no estamos en contra de la adopción.
Estamos totalmente a favor, siempre que sea
para bien del niño que se adopta. La
adopción es uno de los actos más
sublimes que se pueden realizar. Pero siempre
que sirva para protección del niño,
siempre que no sea una excusa para tapar problemas
del matrimonio, ya sea infertilidad, desamor,
etcétera. Y unos apuntes más
con respecto a la identidad. La identidad
es lo más importante que se puede tener
en la vida. Es terrible vivir en la mentira,
con una identidad cambiada. Nuestros niños,
hoy adultos, deben conocer la verdad. Saber
y disfrutar del amor con que sus padres los
engendraron, del nombre que eligieron, con
esa connotación tan especial que indudablemente
tiene.
Estamos conmemorando 27
años de lucha de Abuelas. Y se recuperó
la nieta número 78. Cuando digo se
recuperó, estoy diciendo que esta chica
pudo recuperar su identidad, su verdad, su
historia. En esta búsqueda colaboró
la agrupación HIJOS, nuestros nietos.
Nosotras estamos ya muy mayores. Pero los
jóvenes tomarán las banderas
y saldrán a defender las utopías
de sus padres, que lucharon por un mundo mejor,
sin marginaciones, con protección de
los niños y ancianos, sin analfabetismo.
Ellos, nuestros nietos, luchan por volver
a tener el país que nos robaron.
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